Villa Pagador zona ubicada al sur de la ciudad es un lugar árido y seco a diferencia de la tradicional imagen de la “ciudad jardín”, al llegar al Colegio San Francisco nos percatamos que el comportamiento del alumnado en general era bastante tranquilo, hecho que llamó mucho la atención, pues, generalmente los jóvenes en edad escolar tienden a ser muy dinámicos e inquietos, y creímos que es te comportamiento podría frenar un poco el desenvolvimiento del debate de la película. En esta oportunidad la película que fue asignada a alumnos de 4º de secundaria (de entre 14 y 16 años) fue OSAMA, que relata la realidad Afganistana en cuestión de relaciones de género y derechos de la mujer.
Pasada la película se dio paso al debate con un inicio un poco tímido, identificando los derechos humanos que eran vulnerados en la proyección, se mencionaron tales como el derecho a la no discriminación, a la igualdad entre hombres y mujeres, al trabajo y a un buen servicio de salud entre otros. La comparación con otra realidad como la de India (oportunidad que surgió de una proyección anterior “Agua”), hizo surgir con más fuerza la identificación de la vulneración de estos derechos en diferentes sociedades, llegando hasta Latinoamérica y la nuestra, momento en que el debate cobró fluidez (rompiendo la imagen de los alumnos, que habíamos tenido al llegar al colegio), la principal disputa se tornó entre hombre y mujeres que argumentaban sus opiniones sustentando cada grupo su posición en la película y en la realidad con unas cuantas excepciones de alumnos que hacían alusión a los derechos de las mujeres y las inequidades que ellas sufren, este momento fue muy importante, pues les permitió a los alumnos ver como se reproduce este sistema en nuestro medio y experimentar como reacciona la gente frente a su identificación, entonces el debate se centro en atacar o defender este sistema de género.
Otro factor importante del debate fue que la participación no se centró en un grupo específico, sino que, fue acogiendo diversas opiniones de varios alumnos; un recurso utilizado para alentar a la participación de más alumnos fue, llamarlos al azar de la lista de asistentes se había realizado durante la película, esto permitió exigir la participación y la capacidad de análisis de algunos alumnos que se encontraban hasta ese momento retraídos del debate, introduciéndolos en la discusión.
Puesto que está fue la última proyección en este establecimiento, se procedió a escuchar propuestas de los alumnos sobre esta experiencia con los video debates, entre las que surgieron, hacer una feria en el colegio que este a cargo de los alumnos, para difundir a la población en general, los derechos humanos y la realidad de estos, otra de las propuestas fue la creación de un centro cultural que realice este tipo de actividades y además otras donde los jóvenes puedan desenvolverse en diferentes espacios (además del colegio), se hizo mención de un centro cultural por el sector, que ya no se encontraba en funcionamiento, y retomar el funcionamiento de este. Se pudo notar el descontento en algunos alumnos y alumnas al saber que ya no se procedería a la proyección y sus debates en el Colegio, pero abrió la posibilidad de la auto-organización de los alumnos para hacer esta actividad constante, además de involucrar a los padres de familia y los maestros.
Como resultado, este curso pudo apreciar una realidad presente en el país y el análisis de esta, en construcción de diferentes opiniones y aprendiendo a respetarlas, de las inquietudes surgieron las necesidades de hacer frente a la falta de mecanismos de expresión y su difusión, mediante medidas sencillas viables manejadas por los mismos alumnos.
Liz Mendoza
Moderadora
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